1. Escucha cuando te dice cómo se siente ya que al conocer como lo afecta la enfermedad te hace más sencillo entenderlo.
2. Siempre pregunta en que los puedes ayudar, debes de comprender que esta enfermedad genera problemas como el agotamiento, dolores de estomago, depresión, dolor crónico y cambios de humor. Así que pueden necesitar ayuda para cocinar, limpiar, ir al baño, conducir o cuidar de su familia.
3. Ofrécete para ayudarlos a comenzar a cambiar su estilo de vida, modificar su dieta o empezar a ejercitarse juntos, ayúdalo eliminando azucares, grasas y cafeína de las compras del supermercado.
4. Acompáñalo al doctor y trata de resolver tus dudas a la hora de cuidarlos.
5. Entiende que los pacientes con Fibromialgia no tienen depresión o mal humor porque así lo deseen y que es muy probable que llegue a “desquitarse” contigo.
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