No nos imaginamos cómo nuestras emociones pueden dañar a nuestro cuerpo hasta que llega el día en el que simplemente no podemos seguir, la vida nos obliga a hacer un alto para empezar a detectar el daño que nos hacemos cuando guardamos lo que sentimos en nuestra cabeza, la cual es la que nos traiciona en pensamientos, suposiciones y resentimientos que muchas veces simplemente nosotros somos los que permitimos que estos crezcan enfermando nuestro cuerpo. Es muy importante detectar a tiempo que expresar lo que nos pasa también libera. Nunca es tarde para empezar, quizá necesitamos muchas veces que la vida nos sacuda para aprender a cuidar de nosotros mismos y VIVIR disfrutando lo que tenemos cada día.
Aprender a encausar, descubrir y sanar el cuerpo no es fácil pero si se puede!!
Nuestra actitud y cuidado personal nos hace y ayuda a disfrutar volver a VIVIR
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