A veces quisiera tener unos pies de repuesto, en esos momentos en que siento que no puedo dar un paso más...
Cuando al caminar el dolor me impide ser ágil, y lucir unos bellos zapatos.
Amo a mis hermosos pies, pues ellos me han llevado por lugares maravillosos a travez de los años...
Y al pasar el tiempo recuerdo cuando era niña que corría entre piedras y no me dolían
y que decir de
Las largas caminatas por la playa,
De los bailes de la adolescencia
Y tantas cosas más.
Pies hermosos, pies cansados, pies adoloridos, a pesar de todo los amo.
Aunque en ocasiones me encantaría tener unos pies de repuesto
Para continuar.
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