A menudo, la piel se ve afectada por el lupus y juega un papel muy importante a la hora de diagnosticar la enfermedad, ya sea que se presente únicamente en la piel (lupus eritematoso cutáneo) o en todo el cuerpo (lupus eritematoso sistémico).
Entre los tipos más habituales de lupus cutáneo se encuentran el lupus cutáneo crónico, que a menudo presenta lesiones eruptivas “discoides”, gruesas, escamosas y de color rojo, así como caída del cabello en forma irregular, y el lupus cutáneo agudo, que suele manifestarse con eritemas malares “con forma de mariposa” en las mejillas y la nariz y, en algunos casos, con ampollas llenas de líquido.
En el caso del lupus sistémico, el sistema inmunológico hiperactivo del organismo forma anticuerpos que atacan y dañan no solo la piel sino otros órganos y tejidos fundamentales, como los riñones, el corazón, los pulmones, la sangre y las articulaciones. De los once criterios oficiales para el diagnóstico del lupus sistémico, cuatro están relacionados con la piel: eritema malar, eritema discoide, sensibilidad a la luz solar (fotosensibilidad) y úlceras orales.
Solo una de cada diez personas con lupus cutáneo desarrolla el tipo sistémico. Si usted se protege de los desencadenantes ambientales, como la luz solar y el humo del cigarrillo, y si se cuida de los llamados “indicadores de transición” hacia el lupus sistémico con la ayuda de los médicos especialistas, podrá ayudar a prevenir esta transición grave y tal vez hasta a revertir su curso, si es que ya ha comenzado.
Indicadores: la aparición de las úlceras de la piel y los nódulos y depósitos de calcio, el desarrollo generalizado de dolor muscular o articular y de eritema por lupus debajo del cuello, y proteínas o sangre en la orina.
¿Qué es la causa del lupus?
Casi todas las personas desean saber si el lupus tuvo su origen en algún aspecto de la dieta o el estilo de vida. Aún no está claro por qué algunas personas contraen esta enfermedad, pero los genes y los desencadenantes ambientales juegan un papel fundamental.
¿Qué cosas le pasan a la piel ante la presencia de lupus?
El lupus puede ocasionar una serie de reacciones cutáneas muy parecidas a otros trastornos más comunes de la piel, lo que hace que, muchas veces, el diagnóstico de la enfermedad sea más difícil y dudoso. Por ejemplo, el eritema “mariposa” puede confundirse con rosácea, psoriasis o eczema y retrasar aún más el diagnóstico adecuado, ya que al principio mejoran con corticosteroides.
En los casos de lupus sistémico y cutáneo, las reacciones comunes de la piel son las siguientes:
Parches de lesiones cutáneas discoides, elevadas y de color rojo en las zonas expuestas al sol, como la cara y las manos. Sin tratamiento, las lesiones discoides a menudo empeoran. Las cremas o inyecciones recetadas de corticosteroides pueden ayudar a eliminarlas y, en caso de que no mejoren o sean muy graves, puede intentarse con las píldoras de corticosteroides y los medicamentos antipalúdicos. Un eritema discoide en el cuero cabelludo debe tratarse inmediatamente para evitar su avance.
Un eritema malar de color rojo, con forma de mariposa, en la nariz y las mejillas. Protéjase de la exposición al sol usando una pantalla solar de amplio espectro para evitar o minimizar estos eritemas, y aplíquese pomadas o geles con corticosteroides, de acuerdo con la recomendación de su médico.
Caída del cabello, en mechones o en matas. A veces, la caída es una consecuencia directa de la actividad del sistema inmunológico.
Úlceras en la boca, en la lengua o en la nariz y (rara vez) en la vagina. Las gárgaras con suero de leche o peróxido de hidrógeno diluído en un poco de agua ayudan a aliviar las úlceras y estimular la sanación. Los costicosteroides y los medicamentos antipalúdicos pueden también ayudar. Para las úlceras en la nariz, pruebe vaselina.
Cambios en el color de la piel (pigmento) de tonalidad oscura a clara, que pueden producirse después de que la inflamación por el lupus disminuye, en cuyo caso los medicamentos antipalúdicos o corticosteroides se interrumpen. Se pueden utilizar productos cosméticos para disimular los cambios de color en la piel.
Ronchas o habones (urticaria), que se tratan, por lo común, con medicamentos antihistamínicos, antiserotonínicos y corticosteroides. Si persisten, puede tratarse de un signo de vasculitis, que es una inflamación de los vasos sanguíneos que requiere otros tratamientos.
Otros problemas comunes de la piel relacionados con el lupus son el fenómeno de Raynaud, en el que los dedos se ponen blancos, morados y azules por el frío; la vasculitis, que produce la ruptura de la piel debido a la inflamación de los vasos sanguíneos cerca de la capa superior de la piel; el livedo reticularis, que se presenta con moteados de color rojo o apariencia de encaje debajo de la piel; y la púrpura, que tiene el aspecto de decoloraciones rojas o moradas debajo de la piel, producidas por sangrado. Los medicamentos corticosteroides que se utilizan habitualmente para tratar el lupus pueden también traer complicaciones, como marcas negras y azules y la piel fina.
Parches de lesiones cutáneas discoides, elevadas y de color rojo en las zonas expuestas al sol, como la cara y las manos. Sin tratamiento, las lesiones discoides a menudo empeoran. Las cremas o inyecciones recetadas de corticosteroides pueden ayudar a eliminarlas y, en caso de que no mejoren o sean muy graves, puede intentarse con las píldoras de corticosteroides y los medicamentos antipalúdicos. Un eritema discoide en el cuero cabelludo debe tratarse inmediatamente para evitar su avance.
Un eritema malar de color rojo, con forma de mariposa, en la nariz y las mejillas. Protéjase de la exposición al sol usando una pantalla solar de amplio espectro para evitar o minimizar estos eritemas, y aplíquese pomadas o geles con corticosteroides, de acuerdo con la recomendación de su médico.
Caída del cabello, en mechones o en matas. A veces, la caída es una consecuencia directa de la actividad del sistema inmunológico.
Úlceras en la boca, en la lengua o en la nariz y (rara vez) en la vagina. Las gárgaras con suero de leche o peróxido de hidrógeno diluído en un poco de agua ayudan a aliviar las úlceras y estimular la sanación. Los costicosteroides y los medicamentos antipalúdicos pueden también ayudar. Para las úlceras en la nariz, pruebe vaselina.
Cambios en el color de la piel (pigmento) de tonalidad oscura a clara, que pueden producirse después de que la inflamación por el lupus disminuye, en cuyo caso los medicamentos antipalúdicos o corticosteroides se interrumpen. Se pueden utilizar productos cosméticos para disimular los cambios de color en la piel.
Ronchas o habones (urticaria), que se tratan, por lo común, con medicamentos antihistamínicos, antiserotonínicos y corticosteroides. Si persisten, puede tratarse de un signo de vasculitis, que es una inflamación de los vasos sanguíneos que requiere otros tratamientos.
Otros problemas comunes de la piel relacionados con el lupus son el fenómeno de Raynaud, en el que los dedos se ponen blancos, morados y azules por el frío; la vasculitis, que produce la ruptura de la piel debido a la inflamación de los vasos sanguíneos cerca de la capa superior de la piel; el livedo reticularis, que se presenta con moteados de color rojo o apariencia de encaje debajo de la piel; y la púrpura, que tiene el aspecto de decoloraciones rojas o moradas debajo de la piel, producidas por sangrado. Los medicamentos corticosteroides que se utilizan habitualmente para tratar el lupus pueden también traer complicaciones, como marcas negras y azules y la piel fina.
Evitar la luz solar es uno de los cuidados más importantes para el lupus cutáneo y sistémico.
Los rayos solares ultravioleta UVB y UVA son los que más desencadenan esta afección y los que estimulan las reacciones fotosensitivas. Estas reacciones pueden aparecer los 365 días del año, en días soleados o nublados, y en menos tiempo del que se tarda en caminar hasta la tienda de la esquina.
Los rayos solares ultravioleta UVB y UVA son los que más desencadenan esta afección y los que estimulan las reacciones fotosensitivas. Estas reacciones pueden aparecer los 365 días del año, en días soleados o nublados, y en menos tiempo del que se tarda en caminar hasta la tienda de la esquina.
Protéjase de una exacerbación del lupus.
Aplíquese una crema solar protectora de rayos UVA-UVB de amplio espectro, todos los días del año. Elija un producto con un factor de protección solar de 30 o más y que contenga avobenzona (Parasol 1789), dióxido de titanio y óxido de zinc, ya que estos elementos son los que mejor protegen contra los rayos UVA y UVB. El mexoryl es un ingrediente más nuevo que se utiliza en algunas crema solares y es muy eficaz contra los rayos UVA. Aplíquese la crema solar por la mañana, antes del maquillaje, y no menos de diez minutos antes de salir al aire libre.
Limite las actividades al aire libre que no sean necesarias, especialmente cuando el sol es más intenso (entre las 10 a.m. y las 3 p.m.), y use ropa especial y sombreros de ala ancha para protegerse del sol.
Para reducir al mínimo la exposición a los rayos UVA, coloque un plástico en los cristales de las ventanas, revista las luces halógenas y las lamparillas fluorescentes con envoltorios plásticos y use un protector polarizado en la pantalla de la computadora. Esta precaución no es necesaria en el caso de las pantallas planas, como las de las computadoras portátiles.
Consulte a su médico sobre el riesgo añadido de fotosensibilidad por tomar ciertos medicamentos, como diuréticos, antibióticos, antiinflamatorios y píldoras anticonceptivas.
¿Cómo se pueden tratar o disimular las cicatrices por lupus en la piel?
Aplíquese una crema solar protectora de rayos UVA-UVB de amplio espectro, todos los días del año. Elija un producto con un factor de protección solar de 30 o más y que contenga avobenzona (Parasol 1789), dióxido de titanio y óxido de zinc, ya que estos elementos son los que mejor protegen contra los rayos UVA y UVB. El mexoryl es un ingrediente más nuevo que se utiliza en algunas crema solares y es muy eficaz contra los rayos UVA. Aplíquese la crema solar por la mañana, antes del maquillaje, y no menos de diez minutos antes de salir al aire libre.
Limite las actividades al aire libre que no sean necesarias, especialmente cuando el sol es más intenso (entre las 10 a.m. y las 3 p.m.), y use ropa especial y sombreros de ala ancha para protegerse del sol.
Para reducir al mínimo la exposición a los rayos UVA, coloque un plástico en los cristales de las ventanas, revista las luces halógenas y las lamparillas fluorescentes con envoltorios plásticos y use un protector polarizado en la pantalla de la computadora. Esta precaución no es necesaria en el caso de las pantallas planas, como las de las computadoras portátiles.
Consulte a su médico sobre el riesgo añadido de fotosensibilidad por tomar ciertos medicamentos, como diuréticos, antibióticos, antiinflamatorios y píldoras anticonceptivas.
¿Cómo se pueden tratar o disimular las cicatrices por lupus en la piel?
La tecnología de relleno y rayos láser brinda excelentes posibilidades de mejorar la cicatrización y las alteraciones en la pigmentación y, para determinadas personas, puede ser menos riesgosa que la cirugía plástica. Sin embargo, no deben utilizarse a menos que la enfermedad esté en remisión total. Póngase en contacto con un médico que se especialize en el tratamiento de cicatrices por lupus y esté al tanto de estas nuevas técnicas. El maquillaje disimula y tiene muchos beneficios, y si se combina y aplica en forma adecuada, a menudo oculta por completo la decoloración y las cicatrices de la piel.
AKIMA GUEVARA.
AKIMA GUEVARA.